La pista de auditoría fiable, o PAF, es una característica obligatoria que permite al emisor de una factura seguir y rastrear todas las transacciones (pedido, factura, descuento, depósito, etc.) desde la creación del documento. Como el PAF permite rastrear todos los pasos contables, justificar las transacciones (siempre que se disponga de los documentos originales) y verificar la autenticidad de los intercambios (bienes o servicios vendidos), las empresas pueden aceptar facturas electrónicas que aún no hayan sido firmadas.
Así, gracias a la pista de auditoría fiable, es posible seguir todas las etapas de una factura (en papel o digital) y verificar cualquier anomalía contable.